Castillo de ENCINAS de ESGUEVA
Publicado: Mar 11 Dic, 2012 7:13 pm
El castillo de Encinas de Esgueva se encuentra en la línea defensiva del Esgueva, en la localidad del mismo nombre, provincia de Valladolid.
Construido en el siglo XIV, perteneció a la familia Aguilar, que fueron condes de Encinas y por tanto también señores de este castillo. De su historia se sabe poco. Fue reformado en los siglos XVII y XX.
Consta de un recinto interior y una barbacana con foso, todo ello realizado en sillares de piedra de buena cantería. Su forma es cuadrada y aunque parece tener cuatro altas torres en las esquinas, en realidad sólo son dos, una de ellas la del Homenaje. Es sobrio en elementos decorativos. La barbacana dispone de un perfil en talud para facilitar la existencia del foso. En sus torres figuran los emblemas heráldicos de los Aguilar, Condes de Encinas y Señores del Castillo
En 1850, estaba habitado y era propiedad del Marqués de Lorca.Alrededor de 1950, su propietario, Cándido Moyano, lo vendió al Ministerio de Agricultura, cuyo Servicio Nacional del Trigo lo empleó como almacén de cereal hasta la década de 1970. Se encuentra en buen estado de conservación, completo y restaurado el exterior (con algunas transformaciones), aunque desmantelado el interior.
Construido en el siglo XIV, perteneció a la familia Aguilar, que fueron condes de Encinas y por tanto también señores de este castillo. De su historia se sabe poco. Fue reformado en los siglos XVII y XX.
Consta de un recinto interior y una barbacana con foso, todo ello realizado en sillares de piedra de buena cantería. Su forma es cuadrada y aunque parece tener cuatro altas torres en las esquinas, en realidad sólo son dos, una de ellas la del Homenaje. Es sobrio en elementos decorativos. La barbacana dispone de un perfil en talud para facilitar la existencia del foso. En sus torres figuran los emblemas heráldicos de los Aguilar, Condes de Encinas y Señores del Castillo
En 1850, estaba habitado y era propiedad del Marqués de Lorca.Alrededor de 1950, su propietario, Cándido Moyano, lo vendió al Ministerio de Agricultura, cuyo Servicio Nacional del Trigo lo empleó como almacén de cereal hasta la década de 1970. Se encuentra en buen estado de conservación, completo y restaurado el exterior (con algunas transformaciones), aunque desmantelado el interior.